¡Hola a todos!
Ayer tuve la suerte de poder asistir a la primera edición de El Cine Cocina, 1er Festival de Cine Culinario en Buenos Aires.
El festival en sí se desarrolla del 12 al 17 de octubre en dos locaciones, el Museo del Cine (Caffarena 49) y la Alianza Francesa (Av. Cordoba 946). El mismo consta de una programación gratuita de largometrajes, documentales y películas de animación en las que la protagonista es la comida.
Por otro lado, el segmento El Cine Cocina ofrece menús inpirados en las películas proyectadas, los días 15 y 17 de octubre. Esta actividad es paga y tiene un cupo limitado. Lamentablemente, los cupos para la degustación del 17 ya están agotados ¡No se angustien! Debido al éxito del evento reflejado en la enorme convocatoria, seguramente tengamos otra edición de este festival próximamente.
El Cine Cocina es organizado por la Alianza Francesa, el Instituto Francés Argentino, la Embajada de Francia y el Museo del Cine. Auspicia el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y Air France. Además, es apadrinado por Bruno y Olivier, famosos panaderos dueños de L'Epi.
Al inicio de cada película, chefs, enólogos, críticos y directores de cine presentan las obras, destacando sus experiencias y su saber. Una vez concluída la película se generan debates, talleres culinarios y la degustación de los platos vistos en la pantalla grande, en el caso de haber hecho la reserva.
En el día de ayer, asistí al brindis inaugural del festival en la Alianza Francesa. Allí nos recibieron con una copa de Saint Felicien Nature y pudimos ver la galería de fotos mientras esperabamos que el auditorio abra sus puertas. Una vez allí, Solen Rouillard, directora de actividades culturales de La Alianza, Ode Vergos, fundadora de Odecrea Producciones y co-fundadora de la Asociación Gastronómica Francesa en Argentina Lucullus, Olivier Hanocq y Bruno Gillot tomaron la palabra para presentar tanto el festival como la película de la noche: Les Saveurs du Palais.
Esta película, también conocida con el nombre de Haute Cuisine, es una comedia agridulce francesa en la cual se retoma la historia que unió a Hortense Laboire, famosa cocinera oriunda del sur de Francia, con el Presidente de Francia Françoise Mitterand, quien la nombró sorpresivamente responsable de su cocina personal. A lo largo de la película, Hortense elabora platos simples utilizando las recetas de su abuela, lo cual fascina al Presidente. La chef también privilegia a los pequeños productores, la calidad de los productos y lucha por hacerse respetar en una cocina machista.
Cuando la película concluyó, pasamos al Espace Renault, un impactante salón de arquitectura y decoración francesa. Ahí nos ubicaron en una mesa en U, en la cual habían grandes candelabros, paneras que contenian los panes de L'Epi y los vinos servidos todos provenientes de la bodega Catena Zapata. El menú inspirado en la película fue elaborado y presentado por Patricia Courtois, chef del Bistrot, junto a Bruno y Olivier.
Mientras servían el vino y el champagne, cada comensal tenía sus amuse bouche para 'entretener el paladar', según su traducción literal. Eran 4 bocadillos deliciosos. La entrada: brouillade de cèpes au cerfeuil (hongos portobello con huevos sobre brioche) uno de los platos servidos en la película, seguido por el plato principal: le chou farci au saumon brasié aux petits lardons (repollo relleno con salmón y salsa de pescado)
¡Exquisito! Tan simple y sin embargo tan delicado y distinguido. La salsa de pescado era suave y el repollo junto con el salmón eran muy tiernos. Este último plato es el primero que cocina Hortense para el Presidente y allí muestran el procedimiento para realizarlo. Además, ella pregunta si el Presidente había comido los tallos de las zanahorias baby, algo que hicimos sin dudar cuando nos tocó degustarlas.
Por último, el postre. Un Saint-Honoré avec crème mémé. Esta receta también es uno de los puntos clave de la película ya que es una receta de su abuela que ella debe enseñar a su asistente para que la prepare, mientras ella sale en búsqueda de un repasador para cocinar el repollo, técnica que los cocineros del palacio tampoco utilizaban.
Un ejemplo de mujer y de chef a seguir. Inspiradora película.
Ya concluyendo la cena, sirvieron café acompañado con unos petit-four y Ode volvió a tomar la palabra para agradecer la presencia de todos los organizadores y comensales. Yo por mi parte, creo que fue una experiencia excelente, no solo por la magnífica idea de proyectar una película y luego degustar esos mismos platos, sino porque a su vez tuve la suerte de estar rodeada de personas muy interesantes, apasionadas de la gastronomía.
La cena fue un éxito y lo seguirá siendo en las próximas ediciones de El Cine Cocina.
Más fotos oficiales de evento aquí.
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